viernes, 18 de febrero de 2011

MANOWAR - Battle Hymns MMXI - (2010)



En los últimos retazos del 2010 vió la luz la nueva versión del clásico de Manowar, Battle Hyms. A casi 30 años de su salida original, Di Maio & Co. Deciden regrabar un disco antológico, al que según las propias palabras de Joey, jamás pudieron pulir como hubieran deseado en su momento. Hoy, con los avances tecnológicos la banda intenta darle un brillo acorde a los tiempos que corren sin tratar de perder el encanto del sonido original, más allá de la precaria producción de la época.
Y después de varias escuchas, es como que no termina de cerrarme. Demás está decir que Eric Adams sigue siendo uno de los mejores cantantes que el genero haya dado jamás, al igual que la performance de Di Maio en el bajo, lo que, al menos en mi humilde opinión es lo que sostiene a esta nueva versión de Battle Hyms, que así y todo en ningún momento muestra la solidez del original. Karl Logan cumple sobriamente en el lugar de Ross The Boos, en las seis cuerdas, y el retorno a los parches, después de 26 años de Donnie Hamzik es casi la frutilla del postre. El otro detalle singular es que a la hora de la regrabación de Dark Avenger, optaron el convocar al actor inglés Christoper Lee para que sea la voz del relato que en su primera versión había estado a cargo del inolvidable Orson Welles.
Todos sabemos lo que significó su aparición en 1982, no solo en el momento de su edición, sinó como herencia a través de todos estos años. Este 2010 encuentra a un Manowar cargado de buenas intenciones a la hora de reavivar todo aquello con esta idea, noble, pero a la larga insuficiente. Digo insuficinete y por ahí exagero, pero con cada escucha no puedo evitar comparar las sensaciones, y sin dudas este Battle Hyms, no emociona. Por ahí hasta puedo decir que me conforma, me agrada, pero no mucho más que eso. La verdadera escencia de Manowar quedó en el preludio de los 80, y el destino se encargó que sea ese el lugar indicado, porque mas allá de los avances, la tecnología, y el futuro, cuando la nostalgia nos pida estremecernos, sin dudas desempolvaremos el original. 7/10

















El verdadero himno de batalla (1982)